miércoles, 25 de marzo de 2009

Las embarazadas deben evitar el consumo de carnes crudas y embutidos

La toxoplasmosis no es una enfermedad grave, pero puede producir importantes daños en el feto si se sufre durante la gestación

Una de las quejas más frecuentes de las embarazadas en relación con su dieta es que su médico les ha prohibido que coman jamón, embutidos o carnes que no estén perfectamente cocinadas. La razón que les ha dado su médico es la posibilidad, no alta, pero presente, de que este tipo de productos pudiera contener el parásito Toxoplasma gonndii, que provoca una enfermedad infecciosa, la toxoplasmosis, según informa la Consejería de Sanidad y Consumo de la Comunidad de Madrid en una nota de prensa.

El ciclo vital de este parásito tiene como hospedador definitivo al gato, que elimina los quistes del parásito a través de las heces. Una vez en el exterior, estos quistes, que pueden ser activos durante meses en el medio ambiente, pueden volver a albergarse en animales o en el hombre. Existen varias vías de transmisión al hombre: la primera, por contacto con excrementos de gatos o productos que puedan haber estado en contacto con ellos. Ten en cuenta que los gatos que tienen toxoplasmosis aparentan estar completamente sanos y que hay más probabilidad de que estén infectados aquellos que viven en zonas rurales o que andan sueltos, ante la imposibilidad de saber lo que comen. También se puede contagiar por la ingestión de carnes, verduras o agua contaminada con quistes, o, lo que es más grave, de la madre gestante a su hijo.

La toxoplasmosis es una enfermedad muy común, pero en pocas ocasiones aparecen síntomas que nos hagan acudir al médico. Puede ser aguda o crónica. La infección aguda recientemente adquirida no suele dar síntomas en los niños mayores y en los adultos, y si hay síntomas, suelen ser leves y de corta duración: fiebre, malestar general, dolor de cabeza, dolores musculares e inflamación de los ganglios. Es mucho más peligrosa en pacientes inmunodeprimidos, con posibles repercusiones en el cerebro y en los ojos. El problema más grave es el de la toxoplasmosis congénita. La infección aguda de una mujer durante en embarazo puede transmitirse al feto en el 40-50% de los casos y puede causar muerte fetal o malformaciones graves durante la gestación, en los ojos, el cerebro y en los oídos entre otros órganos. De ahí la importancia de prevenir la enfermedad durante el embarazo. Es probable que el médico indique a la mujer que se haga una prueba para saber si tiene anticuerpos frente a la infección -señal de que ya la ha pasado- e indicará, en caso contrario una serie de medidas fáciles para evitar el contagio en caso contrario.

http://salud.abc.es/nutricion/mayo08/embarazadas-embutido-carne-cruda.html


Grupo 18

Ignacia Díaz R.

Isidora Daroch R.

Sebastían Urrutia L.

No hay comentarios:

Publicar un comentario